El matrimonio entre Fernando e Isabel (1469) fue en secreto ya que la relación de los dos reinos era tensa. Ambos permanecían a las familias donde reinaban diferentes ramas de la dinastía Trastámara.
Enrique IV, hermano de Isabel, cuando se enteró de la noticia, cambió su testamento para que a su muerte reinara su hija Juana la Beltraneja. En torno a las candidatas, a la muerte de Enrique IV, se formaron dos bandos en 1474:
- Isabel se autoproclamó reina de Castilla, tenía el respaldo de algunos de los nobles más influyentes y de muchas ciudades castellanas, además, contaba con la ayuda del rey de Aragón.
-En el lado opuesto, el rey de Portugal, revindicó la corona a Juana, con quien según lo acordado, contraería matrimonio con Portugal. Portugal contaba también con el apoyo de Francia.
El desenlace tuvo lugar en la batalla de Toro (1476) y la Paz de Alcaçovas (1479) donde Portugal, reconocía a Isabel como reina de Castilla. En el mismo año, Fernando heredó el trono de Aragón.
Los años de reinado de los Reyes Católicos se considera como el origen del Estado Moderno en España. España, al no tener ningún significado político, los Reyes Católicos no utilizaban la denominación de "Reyes de España".
En 1475, Isabel y Fernando habían llegado a un acuerdo (la concordia de Segovia), en el que habían fijado las bases de un sistema de gobierno conjunto, pero su unión era solamente dinástico, no territorial.